Apoyo en la higiene y la cura personal, entre otras tareas: el lavado corporal completo en baño o ducha; aseo en cama, así como otras tareas relacionadas con la higiene personal; ayuda a vestirse, afeitado, depilación.
Apoyo en la alimentación: preparación y cocinado de los alimentos, ayuda a la ingestión de alimentos, etc.
Cuidado de la salud: realización de pequeñas curas de acuerdo con las
prescripciones médicas, administración de la medicación; etc.
Movilizaciones: ayudar a levantarse y acostarse; andar y sentarse; realizar movilizaciones y cambios posturales; etc.
Utilización de ayudas técnicas y de movilización (grúas, sillas de ruedas, sillas de baño, etc.) si la persona lo requiere y dispone.